Resumen
Introducción
Comprender un artículo científico no solo es útil para académicos: hoy, cualquier ciudadano expuesto a noticias, redes sociales y contenidos digitales consume interpretaciones de investigaciones científicas. Sin embargo, la manera en que un artículo se construye influye directamente en la legitimidad de sus conclusiones. Por ello, Henríquez y Zepeda (2004) destacan la importancia de dominar esta estructura tanto para quienes escriben como para quienes leen ciencia.
La escritura científica no solo implica redactar: requiere justificar un problema, contextualizarlo, delimitarlo, seleccionar métodos válidos, analizar datos con criterios estadísticos adecuados y argumentar hallazgos de forma lógica. Para los autores, esta habilidad combina creatividad, precisión conceptual, revisión exhaustiva de literatura y sensibilidad para no caer en interpretaciones sesgadas o precipitadas.
Desglose Profundo de las Partes de un Artículo Científico
1. El título: la puerta de entrada al estudio
Un buen título orienta inmediatamente al lector. Debe ser conciso, directo, afirmativo y contener las variables principales del estudio. Henríquez y Zepeda (2004) subrayan que un título extenso o ambiguo puede generar confusión o reducir el impacto del trabajo.
2. Autores e instituciones
Una investigación científica debe identificar claramente a las personas responsables del contenido. La afiliación institucional permite al lector conocer el contexto académico en el que se desarrolló el trabajo. No se incluyen grados académicos ni cargos jerárquicos, pues el foco está en la autoría intelectual.
3. Resumen: síntesis total del estudio
El resumen es uno de los componentes más relevantes de un artículo científico, pues no solo proporciona una visión condensada del estudio, sino que también determina si un lector —especialmente quien consulta bases de datos, repositorios o buscadores académicos— decidirá profundizar en el documento completo. Henríquez y Zepeda (2004) subrayan que el resumen debe ser informativo, autónomo, exacto y estructurado, de modo que permita comprender los elementos esenciales de la investigación sin requerir la lectura del texto principal.
A diferencia de otros tipos de resúmenes (como los ejecutivos o los descriptivos), el resumen científico sigue una estructura formal cuidadosamente definida. Debe redactarse en cuatro partes diferenciadas que, si bien no aparecen separadas gráficamente, sí deben reflejar una secuencia lógica:
1. Objetivo o pregunta de investigación
El primer párrafo debe exponer con claridad qué se estudió y cuál fue la intención del investigador. Un error frecuente es usar enunciados vagos o demasiado generales. El objetivo debe ser conciso, medible y conectado directamente con la hipótesis o con la problemática planteada en la introducción.
2. Metodología
El segundo párrafo debe describir el diseño del estudio, la población, la muestra, los instrumentos utilizados, así como los procedimientos esenciales de análisis. Henríquez y Zepeda (2004) enfatizan que este apartado no debe contener detalles minuciosos, pero sí la información suficiente para que cualquier lector entienda cómo se obtuvo la evidencia.
3. Resultados principales
El tercer párrafo es el núcleo del resumen. Debe presentar los resultados más relevantes del estudio mediante valores numéricos cuando sea pertinente: promedios, porcentajes, proporciones, correlaciones, razones de riesgo, niveles de significancia, entre otros. No deben aparecer interpretaciones, solo hallazgos.
4. Conclusiones
El cuarto párrafo explica el significado esencial de los resultados, siempre vinculándolos al objetivo o hipótesis inicial. No es un espacio para reflexiones extensas ni recomendaciones amplias: más bien, debe ofrecer un cierre claro sobre qué se aprendió.
Henríquez y Zepeda (2004) recomiendan que el resumen no exceda las 250 palabras, que no incluya abreviaturas, tablas, gráficos ni citas, y que sea lo suficientemente autónomo para ser comprendido sin necesidad de acudir al resto del artículo. En pocas palabras, el resumen debe funcionar como una ventana nítida a la esencia del estudio, económica en palabras pero precisa en información.
Ejemplo profundizado de resumen científico
4. Introducción: fundamento conceptual del estudio
Según el documento base, esta sección debe capturar la atención desde la primera línea y presentar:
-
El problema de investigación
-
Los objetivos y/o preguntas de investigación
-
El contexto, antecedentes y revisión de literatura
-
La justificación, es decir, por qué es importante estudiar ese tema
-
Las definiciones de variables
-
Las limitaciones del estudio
Esta sección conecta lo que ya se sabe con lo que falta por conocer. La calidad de la introducción determina la solidez conceptual del estudio.
5. Metodología: el corazón de la validez
Henríquez y Zepeda (2004) destacan que el diseño metodológico debe describirse con precisión. La metodología debe responder fielmente a la pregunta de investigación.
a) Diseño
Debe especificarse si el estudio es experimental, descriptivo, correlacional, longitudinal, cualitativo, mixto, etc. Además, se explica:
-
la manipulación (o no) de variables,
-
el rol del investigador,
-
la temporalidad,
-
el nivel de análisis (correlación, causalidad, inferencia).
b) Población y muestra
Se detalla:
-
la población diana,
-
la población accesible,
-
el tipo de muestreo (probabilístico o no probabilístico),
-
el tamaño de la muestra y su representatividad.
c) Consideraciones éticas
Debe incluir:
-
consentimiento informado,
-
aprobación de comité de ética,
-
confidencialidad,
-
riesgos potenciales.
Ejemplo práctico completo
Un estudio podría describir:
-
Diseño: cuantitativo correlacional.
-
Población: 1,200 estudiantes de preparatoria.
-
Muestra: 200 seleccionados por muestreo aleatorio estratificado considerando edad y sexo.
-
Instrumentos:
-
Cuestionario IPAQ para actividad física, validado internacionalmente.
-
Escala de bienestar emocional con Alfa de Cronbach > .80.
-
-
Análisis: correlación de Pearson y regresión lineal.
-
Ética: consentimiento de alumnos y padres; anonimato garantizado.
6. Resultados: los hallazgos sin interpretación
Ejemplo profundo de resultados
-
El 65% de los estudiantes realiza ejercicio moderado al menos tres veces por semana.
-
El 22% presentó niveles bajos de actividad física.
-
La media de bienestar emocional fue significativamente mayor en el grupo con actividad física regular (M = 4.1) que en el de baja actividad (M = 3.2).
-
Se encontró una correlación positiva (r = .45) y una regresión que explicó un 19% de la varianza del bienestar emocional (p < .01).
7. Discusión y conclusiones: interpretar, no repetir
Aquí el autor debe:
-
comparar sus resultados con estudios previos,
-
explicar coincidencias o divergencias,
-
analizar implicaciones teóricas y prácticas,
-
proponer recomendaciones de política pública o intervención,
-
señalar limitaciones reales sin exagerarlas.
La discusión, según Henríquez y Zepeda (2004), es argumentativa: el autor “dialoga” con la ciencia existente para justificar la validez de los hallazgos.
Ejemplo de discusión profunda
Conclusiones generales del artículo
-
Conocer la estructura de un artículo científico permite evaluar la calidad de la evidencia.
-
La metodología es la sección clave para determinar si un estudio es confiable.
-
La discusión es el espacio para comprender el significado real de los datos.
-
La ciudadanía necesita alfabetización científica para prevenir malas interpretaciones, especialmente en redes sociales.
-
El ejemplo práctico demuestra cómo la teoría se traduce en investigación aplicada.
Referencia
Henríquez Fierro, E., & Zepeda González, M. I. (2004). Elaboración de un artículo científico de investigación. Ciencia y Enfermería, 10(1), 17–21.

No hay comentarios:
Publicar un comentario